Meca del Carnaval y de las playas de película, Río de Janeiro es un destino tan fascinante como diverso.

Así que, si quieres disfrutar al máximo de una aventura en esta ciudad y no sabes por dónde empezar, te lo dejamos fácil, dale un vistazo a este artículo, para descubrir las mejores cosas que puedes hacer en Río de Janeiro. Prepara la maleta con todo lo que necesitarás y ¡nos vamos!

UN CARNAVAL LLENO DE COLORES

Aunque hayas visto miles de fotos, videos o imágenes en la televisión, nada se compara a la experiencia de ver en vivo los desfiles de las escuelas de samba que se realizan en el sambódromo, durante los días centrales del Carnaval.

Recuerda que los desfiles oficiales son más que una exhibición artística, es un concurso con diferentes reglas, para el cual las escuelas de samba se preparan durante todo el año. Los carros alegóricos son gigantescas obras de arte con formas y tamaños increíbles, llenos de luces y color.

Miles de bailarines desfilan al ritmo de la música, luciendo sorprendentes trajes, conocidos muy adecuadamente con el nombre de “fantasías”. Todo pensado para contarte historias maravillosas.

La música interminable, el ritmo, la alegría y la fiesta que reinan durante los desfiles en el sambódromo no tienen comparación. Nunca habrás vivido nada igual.

IPANEMA

Sus arenas marcan la historia de la Bossa Nova. Ipanema está entre las playas favoritas de los cariocas por su encanto y tranquilidad, mundialmente conocida por la música “Chica de Ipanema”, de Tom Jobim y Vinicius de Morais. La playa, con 2km de extensión, de Arpoador al Jardín de Alah, es punto de encuentro de jóvenes habitantes y turistas encantados, principalmente cerca al puesto 9. La playa es utilizada para la práctica de diversos deportes, además de ser el escenario de conciertos al aire libre. Entre las actividades favoritas están el surf, el frescobol, el voleibol, el fútbol y el futvolei. Cariocas y turistas suelen sentarse en sus arenas, en el fin de la tarde, para charlar y aplaudir la magnífica puesta del sol.

PLAYA DE LEBLON

Playa que reúne familias todos los días con un área específica para niños, llamada de Baixo Pepê.

Además de los programas familiares, atrae gente joven y bonita, que suele desfilar por su acera anticipando tendencias de la moda carioca. Al final de la playa, junto a la subida de Vidigal, se encuentra un mirador con una vista deslumbrante de la orilla de Leblon e Ipanema. ¡Imperdible!

COPACABANA

La playa de Copacabana tiene 6 kilómetros de largo y aunque recorrerlos todos puede darte mucho calor, siempre puedes refrescarte con un buen chapuzón en la que los cariocas llaman la Princesinha do Mar. Es uno de los lugares más turísticos de Río pero conserva el encanto que lo hace único. Si te cansas de estar al sol adéntrate en las bohemias calles del barrio para disfrutar de un refresco o catar la gastronomía brasileña en uno de sus muchos restaurantes. Sin duda, una de las mejores cosas que hacer en Río de Janeiro.

CRISTO REDENTOR

De brazos abiertos sobre la Guanabara, en la cima del cerro de Corcovado está el Cristo Redentor, uno de los sitios de interés más buscados de Río de Janeiro. Más grande y famosa escultura en estilo Art Decó del mundo, la estatua de Cristo Redentor empezó a ser planeada en 1921 y fue desarrollada por el ingeniero Heitor da Silva Costa a lo largo de cinco años de trabajo, de 1926 hasta 1931, el año de inauguración del monumento.

Está ubicado en el Parque Nacional de Tijuca, a 710 metros sobre el nivel del mar, desde donde se puede disfrutar de uno de los más bellos paisajes de la ciudad. En total 220 escalones llevan hasta los pies de la famosa estatua, elegida una de las Siete Maravillas del Mundo en votación organizada en 2007 por la institución suiza New 7 Wonders Foundation.

ACUARIO MARINO DE RÍO (AQUARIO)

Uno de los acuarios más grandes de Sudamérica está ubicado en el Porto Maravilha y reúne aproximadamente tres mil animales en 28 ambientes, lo que suma 4,5 millones de litros de agua salada.

La mayor atracción es el Recinto Oceánico, con 3,5 millones de litros de agua y siete metros de profundidad, donde el público tiene la oportunidad de pasar a través de un túnel subacuático, además de poder vivir la experiencia de sumergir con peces, rayas y los temidos tiburones. El lugar también será el escenario de la actividad “Dormindo no Aquário” (durmiendo en el acuario), destinada a los niños – a partir de los seis años – que quieran pasar la noche en AquaRio. Otro atractivo son los llamados “tanques de toque”, que ofrecen una oportunidad única de acercarse aún más a los seres acuáticos y tocar en rayas y tiburones. Los demás lugares hospedan especies como el pez cirujano, el mero, el abadejo, el tiburón gato, el pez león, el tiburón bambú, el pez morena, el tiburón de arrecife de punta blanca, entre otras.

Explora, siente y disfruta lo mejor de Río de Janeiro. Una ciudad tan viva y colorida que te dejará sin aliento.